¿Tu gato o perro está celoso por una nueva incorporación? Descubre por qué y cómo afecta a su vida cotidiana
Este blog explica que los celos en perros y gatos son una respuesta emocional natural ante la llegada de un nuevo miembro (otra mascota, un bebé, etc.) o un cambio en la rutina, lo que genera en la mascota el temor a perder atención o su espacio.
Las señales comunes incluyen:
Perros: Pedir más atención, interponerse, ladridos excesivos o desobediencia.
Gatos: Esconderse, evitar el contacto, marcar territorio con orina o rascados.
Para ayudar a su mascota a adaptarse, el artículo recomienda mantener sus rutinas estables, dedicarle tiempo individual exclusivo, usar el refuerzo positivo y realizar las presentaciones de forma gradual. También destaca que una buena alimentación es crucial para su equilibrio emocional y para gestionar el estrés.
Se aconseja consultar a un profesional si los celos derivan en agresiones, pérdida de peso o problemas de marcaje/destrucción severos.
